Colonoscopia

¿Qué es una colonoscopia?

La colonoscopia es una exploración que permite la visualización directa de todo el intestino grueso y también, si es necesario, la parte final del intestino delgado (íleon terminal), utilizando un tubo flexible que se introduce a través del ano.

¿Qué preparación se requiere?

Para poder realizar la colonoscopia el intestino grueso debe estar limpio, para ello 3 o 4 días antes seguirá una dieta exenta de fibra, suprimiendo frutas, verduras, legumbres pan integral, etc. El día antes de la prueba deberá tomar un preparado laxante.

El día de la prueba evitará la ingesta de alimentos sólidos y líquidos desde la noche anterior. En caso de que deba tomar alguna medicación lo hará cuanto antes, ayudándose si es necesario de pequeños sorbos de agua.
Hay una serie de fármacos que pueden interferir con la realización de la colonoscopia, así es conveniente que 5-7 días antes de realizar la exploración no se tomen medicamentos del tipo de aspirinas, antiinflamatorios, anticoagulantes o medicamentos con hierro. Todo esto deberá comentarlo con su médico e indicarlo al personal que le atienda en la Unidad de Endoscopia.

Nos informará asimismo si padece alergia a algún tipo de medicación, si tiene algún problema cardíaco o respiratorio importante, si es usted portador de una prótesis valvular cardíaca, o si padece alguna enfermedad infecciosa del tipo de la hepatitis viral, etc.

¿Cómo se realiza la colonoscopia?

El paciente, antes de entrar en la sala de endoscopia, deberá quitarse todos los objetos que lleve de metal (reloj, anillos, pulseras, collares, etc.), así como lentes de contacto, e indicará a la enfermera si es portador de un marcapasos cardíaco.

Se le administrará medicación del tipo de analgésicos y sedantes, para que la exploración sea menos molesta.
Durante la prueba puede experimentar molestias abdominales y sensación de hiperpresión abdominal, con necesidad de evacuar su intestino. El tiempo aproximado de la exploración oscila entre 15 y 60 minutos.
Durante la colonoscopia, si es necesario, se toman pequeñas muestras de mucosa (biopsias) para estudios de Anatomía Patológica. En el caso de detectar pólipos, pueden ser extirpados usando un bisturí eléctrico. Otras técnicas paralelas que se utilizan son la administración de sustancias esclerosantes u otros métodos de coagulación para el tratamiento de focos de hemorragia, bandas elásticas para el tratamiento de hemorroides, balones neumáticos para dilatar zonas estrechas, etc.

Ninguno de estos procedimientos adicionales suelen provocar dolor, ya que la mucosa del intestino grueso no tiene terminaciones nerviosas sensitivas.

Después de la colonoscopia

Es conveniente venir acompañado de un familiar o amigo, ya que la medicación administrada puede alterar marcadamente sus reflejos y su capacidad sensorial. Durante el resto del día evitará el conducir coches u otro tipo de vehículos o tomar decisiones importantes. Nosotros le sugerimos que descanse tranquilo después de la exploración.

Riesgos

Las complicaciones que pueden surgir son:
Distensión del abdomen, dolor, hipotensión, flebitis, reacciones alérgicas, infección, aspiración bronquial, hemorragia,
perforación y paro cardiorrespiratorio.

Estas complicaciones son raras, menos de una por cada 1000 exploraciones, pero pueden requerir un tratamiento urgente e incluso
una intervención quirúrgica. Estos riesgos son algo más altos cuando la colonoscopia se utiliza con aplicación terapéutica (extirpación de pólipos, dilatación de estenosis, etc.). Usted debe informar a los médicos del Servicio de Digestivo en el caso de que presente dolor abdominal importante, acompañado de fiebre o de hemorragia rectal, en las horas o días posteriores a la colonoscopia.